Contenido
¿Quien es el más Hermoso?
Esta fabula es muy conocida por grandes y niños ¿Quien es el más Hermoso? es un relato muy interesante que alimenta el ego por la belleza exterior.
Había una vez, en una ciudad de China, vivía un caballero llamado Zou Ji. Él era muy guapo y lo tenía muy claro, así que pasaba todo el día mirándose en el espejo para admirar su propia hermosura.
– ¡Tengo mucha suerte! Mi rostro es delicado, mi cuerpo es esbelto y mi personalidad llama la atención a donde quiera que voy.
Su elegancia era muy mencionada en el reino, pero habían rumores de que había otro hombre que podía competir con él en belleza: un señor llamado Xu, que vivía en otra ciudad.
Un día, su sirviente personal llamó a su habitación y le dijo:
– Señor, dentro de una hora tiene una cita en su despacho con un hombre de negocios muy importante.
– ¡Tienes razón! En seguida me arreglo y bajo a recibirlo.
Zou Ji tomó un baño, se vistió con su mejor vestimenta y contempló su apariencia en el espejo para ver si todo estaba perfecto.
Mientras apreciaba su belleza, el caballero le preguntó a su mujer:
– Querida, yo no conozco a ese señor Xu del que tanto hablan en el pueblo, pero tú sí. Dime, ¿quién es más hermoso de los dos?
Su esposa le contestó inmediatamente:
– Tú, querido. ¡El señor Xu es muy guapo, pero no se puede comparar con tu belleza!
A Zou Ji le gustó mucho la respuesta de su esposa, pero no quedó satisfecho y decidió pedir una segunda opinión. Salió de su alcoba, bajó por la escalera y llegó al despacho. Allí encontró a su ama de llaves, una mujer en la cual confiaba plenamente, ya que llevaba más de veinte años trabajando en el hogar.
El ama le deseó los buenos días y siguió su camino.
– ¡Buenos días, señor!
– ¡Espera un minuto, por favor! Quiero preguntarte algo y quiero que seas muy sincera conmigo.
– Dígame, señor.
– Tú también conoces a ese famoso señor Xu. Necesito que me digas si él es más hermoso que yo.
La respuesta fue directa:
– ¡No, señor! ¡Usted es mucho más atractivo que él!
Zou Ji agradeció la respuesta, pero aún tenía dudas.
Minutos después, llamaron a la puerta. De nuevo, era su sirviente
– Señor, acaba de llegar su invitado.
– ¡Gracias, dígale que puede pasar!
Zou Ji recibió al hombre de negocios con una sonrisa y lo invitó a sentarse en un sillón que había en su despacho.
– Antes de meternos en temas profesionales, me gustaría hacerle una pregunta muy personal, si no le molesta que lo haga.
– ¡No, no me molesta! ¿Qué quiere saber?
– Sé que usted y el señor Xu son muy amigos desde la infancia.
– Sí, así es.
– ¿Y, según su opinión, él es más atractivo que yo?
El caballero se sorprendió ante la pregunta, pero la contestó con tranquilidad:
– No se preocupe por eso, amigo. ¡Usted es mucho más atractivo que él, sin punto de comparación!
– Muchas gracias, me deja usted tranquilo.
¿Quién es el mas hermoso del mundo?
La reunión entre ellos continuó con normalidad. Pero, exactamente tres días después, el caballero se enteró que el famoso señor Xu estaba visitando la ciudad. Zou Ji corrió rápidamente a contárselo a su esposa.
– ¡Querida, el señor Xu está en la ciudad y es el momento perfecto para conocerlo! Le mandé una carta para que viniera hoy a comer a nuestra casa y ha aceptado la invitación.
– ¡Es una buena noticia, amor mío! Avisaré para que todo esté listo.
– ¡Perfecto! Voy arriba a arreglarme un poco. Tengo que escoger muy bien lo que voy a ponerme. ¡Al fin comprobaré si yo soy más hermoso que él!
El señor Xu se presentó en la casa y la pareja salió a recibirlo. En cuanto Zou Ji lo vio, se quedó mudo.
El señor Xu era un muchacho muy guapo cuya elegancia era imposible de superar. Sus dientes eran muy blancos y perfectos, tenía los ojos de color verde y su piel parecía suave, como si fuera de seda.
Zou Ji se sintió muy miserable. Para él, era evidente que el señor Xu era un caballero mucho más atractivo y seductor que él.
Esa noche, la tristeza no lo dejó dormir bien. Lo peor no fue comprobar que no era tan hermoso como el señor Xu, sino que sabía que su mujer, su ama de llaves de confianza y el hombre de negocios le habían mentido.
– “Mi esposa me dijo que yo era más hermoso que el señor Xu porque me quiere y desea que yo esté feliz. Mi ama de llaves me dijo lo mismo, pero lo hizo por miedo a que la despida de su trabajo. También el hombre de negocios que me visitó me aseguró que yo era más bello, pero lo hizo porque me necesita para ganar dinero”
Zou Ji suspiró con mucha tristeza:
– ¡Es muy difícil saber lo que realmente piensan los demás!
Zou Ji aprendió que a todos nos gusta que nos digan lo maravillosos que somos, pero hay personas que lo hacen únicamente por interés. Si te interesa más de ésta fabula te dejo un enlace, y tambien te invito a que sigamos deleitandonos con nuestras aventuras y seguir leyendo, vamos solo dale clic aquí
Si deseas leer más cuentos, te recomendamos estas inolvidables histórias:
